Al parecer, las primeras investigaciones consideran que el servicio iCloud de Apple había sido pirateado para acceder a las imágenes robadas. El robo podría haberse producido a través de un código informático que revela fácilmente las contraseñas de los usuarios.
Desde el FBI también han confirmado que están investigando el caso pero no han querido dar más datos.
Jennifer Lawrence, una de las actrices más perjudicadas por el robo, ha pedido a las autoridades que depuren responsabilidades y procesen a los culpables de las filtraciones.
Reportaje de Cuatro.com, con la intervención de Víctor Domingo, presidente de la Asociación de Internautas.