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CCOO defiende el acceso a Internet de los trabajadores


Internet se está imponiendo en el mundo laboral y los derechos sindicales de los trabajadores deben adaptarse a este cambio. Es la opinión de Comisiones Obreras (CCOO), y tiene en Telefónica el precedente que necesitaba para iniciar una campaña en favor de esta adaptación.




El convenio de la operadora, firmado la semana pasada y con vigencia para dos años, compromete a la dirección de la compañía para que facilite a todos sus trabajadores una dirección electrónica y acceso a Internet. Para los empleados que no tengan un ordenador asignado (por ejemplo, porque trabajan en la calle), Telefónica les suministrará puntos de conexión.

Con estas herramientas, los telefónicos podrán comunicarse (vía Internet o la red interna o intranet) con sus representantes sindicales, o acceder a las páginas de los sindicatos. No habrá restricciones en este aspecto, tanto en una como en otra dirección, de forma que los comités de empresa podrán utilizar las nuevas tecnologías como tablón de anuncios o como medio de comunicación e información de sus representados.

La compañía se ha comprometido a no invadir la intimidad de sus empleados controlando los mensajes electrónicos que envíen o reciban o las páginas web que visiten. Salvo que existan indicios de actuaciones delictivas por parte de un trabajador. Este es, quizás, uno de los puntos más endebles del acuerdo entre las partes, dada la dificultad de demostrar un uso ilícito o abusivo del correo electrónico si no se puede acceder previamente al mismo.

No todo serán derechos para los trabajadores. Según el convenio de Telefónica, se acabó el uso del e-mail para usos particulares.

Onda Cero ha incorporado también estos principios a su nuevo convenio colectivo.

El secretario general de CCOO, José María Fidalgo, recordó ayer que el Senado, por unanimidad, acordó instar al Gobierno a que legisle en favor de la nueva realidad, así como las sentencias que los tribunales han dictado reconociendo el derecho de los trabajadores y de los sindicatos a utilizar las nuevas herramientas y a conservar su intimidad.

Reproducido de El Mundo

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