Estas obras, de acuerdo con las condiciones establecidas en la licencia tienen que efectuarse de acuerdo con las indicaciones de los servicios técnicos municipales, Aguas de Lorca y la supervisión de la Policía Local, procurando causar las menores molestias a los vecinos y al tráfico viario y peatonal.
La intención de ONO es llegar a 17.000 viviendas y 2.500 locales comerciales antes de final de año y ya disponen de la autorización de 13.000 viviendas para extender la red de cableado. En el recinto histórico no se permitirán los cables por las fachadas y tampoco en los edificios de nueva construcción que van equipados para distribuir internamente todas las infraestructuras de telecomunicaciones.