EFE Así lo ha anunciado hoy Carles Solá, conseller de Universidades, Investigación y Sociedad de la Información (Dursi) en su comparecencia ante la comisión de la Sociedad de la Información del Parlament de Cataluña.
Solá ha avanzado que "se recomienda una gestión privada de esta infraestructura pública -la nueva red de fibra óptica que impulsa la Generalitat- y mantenemos conversaciones con empresas privadas para que a través de un concurso público en régimen de concesión inviertan y gestionen esta red".
Este anuncio cambia radicalmente el planteamiento del operador público de telecomunicaciones que iba a impulsar la Generalitat, ya que, por tanto, el mismo estará gestionado por la empresa privada que gane el concurso.
La Generalitat tiene el plan de invertir 233 millones de euros en los próximos años en una red de fibra óptica que sería administrada por un operador neutro que facilitaría el acceso a la red a terceros para que pudieran ofrecer servicios de banda ancha en aquellos lugares en de Cataluña en los que dichos servicios sólo los da Telefónica, una compañía si bien no se ha pronunciado oficialmente sobre el proyecto no lo veía con simpatía.
Hasta ahora, la Generalitat había destacado el "carácter público" que iba a tener este operador neutro pero con el nuevo anuncio de un concurso abierto empresas privadas podrán presentarse al concurso para gestionar esta red de fibra.
Esta situación favorecería a empresas especialistas en la gestión de redes de telecomunicaciones como es el caso de Abertis Telecom o Medialatina.
"Se hará un concurso público para la gestión y explotación de la infraestructura del ente gestor", ha avanzado hoy Solá, que en principio gestionaría la red de la Generalitat "que cuenta con más de 1.000 kilómetros de canalizaciones, incluyendo la red de Ferrocarriles de la Generalitat".
El ente gestor será un consorcio entre la Generalitat y Localret y gestionará el derecho de uso de todas las infraestructuras de titularidad de la Generalitat y el control despliegue de la red además de tutelar la política de precios del operador neutro, según ha detallado Solá en su intervención.
Este proyecto es fundamental porque a juicio de Solá, "la tecnología clave para la banda ancha ha de ser la fibra óptica, aunque por el momento se estén utilizando otras -aludiendo al ADSL- por lo que hace falta una red de fibra óptica abierta".
Según el conseller, "con este modelo se consiguen alcanzar los objetivos marcados con la participación de capital privado", y ha detallado estos objetivos como "situar a Cataluña entre los cinco países líderes en Europa en telecomunicaciones y sociedad de la información".
El proyecto del operador neutro prevé una inversión de 233 millones en el despliegue de 900 kilómetros de red, que se sumaría a los 1.000 kilómetros de la Generalitat y que por lo tanto tendría 1.900 kilómetros.
Solá ha detallado que en 2005 ya se están invirtiendo 20 millones de euros para redes troncales en 17 municipios, básicamente conectando la red con la que cuenta la Generalitat y la desplegada a lo largo del Eix Transversal o C-25.
Para 2006, según ha explicado el conseller, se invertirán otros 20 millones para conectar otros cincuenta municipios.
El anuncio de empresas de capital privado en la gestión del operador neutro se produce después de que el ministro de Industria, José Montilla, declarase que este proyecto le parecía "un modelo sobrepasado".
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Solá ha avanzado que "se recomienda una gestión privada de esta infraestructura pública -la nueva red de fibra óptica que impulsa la Generalitat- y mantenemos conversaciones con empresas privadas para que a través de un concurso público en régimen de concesión inviertan y gestionen esta red".
Este anuncio cambia radicalmente el planteamiento del operador público de telecomunicaciones que iba a impulsar la Generalitat, ya que, por tanto, el mismo estará gestionado por la empresa privada que gane el concurso.
La Generalitat tiene el plan de invertir 233 millones de euros en los próximos años en una red de fibra óptica que sería administrada por un operador neutro que facilitaría el acceso a la red a terceros para que pudieran ofrecer servicios de banda ancha en aquellos lugares en de Cataluña en los que dichos servicios sólo los da Telefónica, una compañía si bien no se ha pronunciado oficialmente sobre el proyecto no lo veía con simpatía.
Hasta ahora, la Generalitat había destacado el "carácter público" que iba a tener este operador neutro pero con el nuevo anuncio de un concurso abierto empresas privadas podrán presentarse al concurso para gestionar esta red de fibra.
Esta situación favorecería a empresas especialistas en la gestión de redes de telecomunicaciones como es el caso de Abertis Telecom o Medialatina.
"Se hará un concurso público para la gestión y explotación de la infraestructura del ente gestor", ha avanzado hoy Solá, que en principio gestionaría la red de la Generalitat "que cuenta con más de 1.000 kilómetros de canalizaciones, incluyendo la red de Ferrocarriles de la Generalitat".
El ente gestor será un consorcio entre la Generalitat y Localret y gestionará el derecho de uso de todas las infraestructuras de titularidad de la Generalitat y el control despliegue de la red además de tutelar la política de precios del operador neutro, según ha detallado Solá en su intervención.
Este proyecto es fundamental porque a juicio de Solá, "la tecnología clave para la banda ancha ha de ser la fibra óptica, aunque por el momento se estén utilizando otras -aludiendo al ADSL- por lo que hace falta una red de fibra óptica abierta".
Según el conseller, "con este modelo se consiguen alcanzar los objetivos marcados con la participación de capital privado", y ha detallado estos objetivos como "situar a Cataluña entre los cinco países líderes en Europa en telecomunicaciones y sociedad de la información".
El proyecto del operador neutro prevé una inversión de 233 millones en el despliegue de 900 kilómetros de red, que se sumaría a los 1.000 kilómetros de la Generalitat y que por lo tanto tendría 1.900 kilómetros.
Solá ha detallado que en 2005 ya se están invirtiendo 20 millones de euros para redes troncales en 17 municipios, básicamente conectando la red con la que cuenta la Generalitat y la desplegada a lo largo del Eix Transversal o C-25.
Para 2006, según ha explicado el conseller, se invertirán otros 20 millones para conectar otros cincuenta municipios.
El anuncio de empresas de capital privado en la gestión del operador neutro se produce después de que el ministro de Industria, José Montilla, declarase que este proyecto le parecía "un modelo sobrepasado".
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