Auna Telecomunicaciones es una de las tres divisiones resultantes de la división que este grupo, tras el que se encuentran pesos pesados como SCH, Endesa, Unión Fenosa e ING, efectuó el pasado mes de junio. Las otras dos son Amena, dedicada a la telefonía móvil, y Auna Audiovisual.
De todas formas, no es una noticia que extrañe a nadie. Era cosa sabida que el segundo operador de telecomunicaciones español, que ofrece servicios de cable y telefonía fija, no está pasando precisamente un buen momento de forma y planeaba un buen recorte de empleos. De hecho, sabiendo lo que se les venía encima, los trabajadores de Auna Telecomunicaciones ya habían protagonizado distintas protestas.
Auna justifica este casi millar de despidos aludiendo a la crisis existente y a que no queda otra opción si se quiere asegurar la viabilidad de la empresa, ya que las enormes inversiones realizadas no se han rentabilizado por la situación real de la demanda. Tampoco han olvidado dar un tirón de orejas al gobierno, al mencionar también como una de las causas de su desgracia que la liberalización del mercado español de telecomunicaciones fijas ha sido poco efectiva.
El siguiente paso será la negociación que llevarán a cabo los responsables de la empresa con los empleados. En Auna dicen que están más que dispuestos a alcanzar un acuerdo amistoso, mientras que en Comisiones Obreras han asegurado que las negociaciones no se han iniciado formalmente porque la empresa no ha facilitado la documentación necesaria y que no se puede presentar un solo expediente para todo el grupo. Además, no se han especificado las indemnizaciones que recibirán los trabajadores, por lo que temen que la compañía quiera librarse de ellos dándoles el mínimo: 20 días por año trabajado.
Auna abandonó la pequeña participación que tenía en el portal Wanadoo (tiempo atrás había vendido su portal eresMas y cerrado la televisión digital terrenal Quiero TV), y a principios de septiembre se especuló con insistencia sobre la posibilidad de que se fusionase con Ono.
El presidente del Grupo Auna reconoció que mantendría conversaciones al respecto con la primera operadora de cable del país, a la que no tampoco le disgustaba lo más mínimo la idea. Parece que el Banco Santander Central Hispano, principal accionista de ambas empresas, también estaba muy interesado.
Reproducido de Baquía.com
Página informativa de los trabajadores de Auna
De todas formas, no es una noticia que extrañe a nadie. Era cosa sabida que el segundo operador de telecomunicaciones español, que ofrece servicios de cable y telefonía fija, no está pasando precisamente un buen momento de forma y planeaba un buen recorte de empleos. De hecho, sabiendo lo que se les venía encima, los trabajadores de Auna Telecomunicaciones ya habían protagonizado distintas protestas.
Auna justifica este casi millar de despidos aludiendo a la crisis existente y a que no queda otra opción si se quiere asegurar la viabilidad de la empresa, ya que las enormes inversiones realizadas no se han rentabilizado por la situación real de la demanda. Tampoco han olvidado dar un tirón de orejas al gobierno, al mencionar también como una de las causas de su desgracia que la liberalización del mercado español de telecomunicaciones fijas ha sido poco efectiva.
El siguiente paso será la negociación que llevarán a cabo los responsables de la empresa con los empleados. En Auna dicen que están más que dispuestos a alcanzar un acuerdo amistoso, mientras que en Comisiones Obreras han asegurado que las negociaciones no se han iniciado formalmente porque la empresa no ha facilitado la documentación necesaria y que no se puede presentar un solo expediente para todo el grupo. Además, no se han especificado las indemnizaciones que recibirán los trabajadores, por lo que temen que la compañía quiera librarse de ellos dándoles el mínimo: 20 días por año trabajado.
Auna abandonó la pequeña participación que tenía en el portal Wanadoo (tiempo atrás había vendido su portal eresMas y cerrado la televisión digital terrenal Quiero TV), y a principios de septiembre se especuló con insistencia sobre la posibilidad de que se fusionase con Ono.
El presidente del Grupo Auna reconoció que mantendría conversaciones al respecto con la primera operadora de cable del país, a la que no tampoco le disgustaba lo más mínimo la idea. Parece que el Banco Santander Central Hispano, principal accionista de ambas empresas, también estaba muy interesado.
Reproducido de Baquía.com
Página informativa de los trabajadores de Auna