I. Abril Cinco Días .- Por primera vez hay un seguimiento oficial del regulador español de las telecomunicaciones (CMT). La comisión ha decidido incluir las líneas de fibra óptica entre los datos que da cada mes sobre el estado del sector . Pero estos números no cambian la realidad que han anticipado organismos como la OCDE o el FTTH Council.
España está muy lejos de los países líderes en despliegue de estas nuevas redes, que llevarán a los hogares internet a 100 megas, televisión de alta definición y todas las potencialidades de una conexión de última tecnología.
Los datos son de enero y dicen que a cierre de ese mes había 62.097 conexiones de fibra óptica en España. Mientras, las líneas de banda ancha rozan los 10,7 millones, así que toca a poco más de media conexión por cada 100 internautas. Otra forma de ver esta cifra es compararla con los datos de nuevos clientes que se suman a la banda ancha cada mes. En enero fueron 63.319 usuarios, así que puede decirse que en solo 31 días se apuntan al acceso a internet más personas de las que tienen fibra en toda España.
El número concreto es de 0,58 líneas de fibra por centenar de accesos a internet a alta velocidad, pero la realidad es incluso un poco más negativa, porque la CMT incluye también algunas conexiones empresariales.
Fuera del campo corporativo, la grandísima mayoría de las líneas de fibra que hay en España son de Telefónica. Y la buena noticia es que la operadora está pegando un acelerón en su despliegue. Solo en enero se instalaron 6.235 líneas de fibra, lo que supone un 10% del total. Y, otra vez, Telefónica es la dueña de casi todas ellas, con una política cada vez más agresiva que ha llevado a esta compañía a regalar incluso el servicio para que los clientes se apunten, según fuentes del mercado.
La soledad del exmonopolio
El problema para que esta tecnología cobre más importancia en España es que Telefónica está practicamente sola. Las operadoras de cable están fuera de esta competición, salvo la asturiana Telecable, que tiene planes para desplegar fibra en Extremadura. Vodafone y Jazztel reniegan por el momento de cualquier inversión en nuevas redes superveloces, así que solo Orange está dispuesta a competir con Telefónica en este campo. Por ahora, sin embargo, las líneas que tiene la filial de France Télécom forman parte de proyectos piloto y la CMT no las tiene en cuenta en sus cifras.
Telefónica se desploma en enero
Eso sí, el despliegue de fibra no le ha servido a Telefónica para mejorar sus cifras en banda ancha. Entre noviembre y enero, ha sido la operadora que menos clientes de banda ancha ha captado, con un 14,63% del total. Y si se miran solo los datos de enero, el resultado es que Telefónica ha conseguido 685 clientes de acceso a internet, lo que significa que solo uno de cada 100 usuarios ha optado por darse de alta con el exmonopolio en este arranque de año.
Otra vez, las mejores cifras son para las operadoras alternativas de ADSL, con Jazztel y Orange a la cabeza. En tres meses han logrado el 64,4% de las altas. El cable, mientras tanto, se recupera algo y firma casi el 21% de la captación entre noviembre y enero.
España está muy lejos de los países líderes en despliegue de estas nuevas redes, que llevarán a los hogares internet a 100 megas, televisión de alta definición y todas las potencialidades de una conexión de última tecnología.
Los datos son de enero y dicen que a cierre de ese mes había 62.097 conexiones de fibra óptica en España. Mientras, las líneas de banda ancha rozan los 10,7 millones, así que toca a poco más de media conexión por cada 100 internautas. Otra forma de ver esta cifra es compararla con los datos de nuevos clientes que se suman a la banda ancha cada mes. En enero fueron 63.319 usuarios, así que puede decirse que en solo 31 días se apuntan al acceso a internet más personas de las que tienen fibra en toda España.
El número concreto es de 0,58 líneas de fibra por centenar de accesos a internet a alta velocidad, pero la realidad es incluso un poco más negativa, porque la CMT incluye también algunas conexiones empresariales.
Fuera del campo corporativo, la grandísima mayoría de las líneas de fibra que hay en España son de Telefónica. Y la buena noticia es que la operadora está pegando un acelerón en su despliegue. Solo en enero se instalaron 6.235 líneas de fibra, lo que supone un 10% del total. Y, otra vez, Telefónica es la dueña de casi todas ellas, con una política cada vez más agresiva que ha llevado a esta compañía a regalar incluso el servicio para que los clientes se apunten, según fuentes del mercado.
La soledad del exmonopolio
El problema para que esta tecnología cobre más importancia en España es que Telefónica está practicamente sola. Las operadoras de cable están fuera de esta competición, salvo la asturiana Telecable, que tiene planes para desplegar fibra en Extremadura. Vodafone y Jazztel reniegan por el momento de cualquier inversión en nuevas redes superveloces, así que solo Orange está dispuesta a competir con Telefónica en este campo. Por ahora, sin embargo, las líneas que tiene la filial de France Télécom forman parte de proyectos piloto y la CMT no las tiene en cuenta en sus cifras.
Telefónica se desploma en enero
Eso sí, el despliegue de fibra no le ha servido a Telefónica para mejorar sus cifras en banda ancha. Entre noviembre y enero, ha sido la operadora que menos clientes de banda ancha ha captado, con un 14,63% del total. Y si se miran solo los datos de enero, el resultado es que Telefónica ha conseguido 685 clientes de acceso a internet, lo que significa que solo uno de cada 100 usuarios ha optado por darse de alta con el exmonopolio en este arranque de año.
Otra vez, las mejores cifras son para las operadoras alternativas de ADSL, con Jazztel y Orange a la cabeza. En tres meses han logrado el 64,4% de las altas. El cable, mientras tanto, se recupera algo y firma casi el 21% de la captación entre noviembre y enero.
