Gemma Cano - Bolsa 5 Si ayer fue el turno de palabra de los dos últimos presidentes de Telefónica de España (el actual, Luis Lada, y el anterior, Julio Linares) hoy el protagonismo ha sido para los testigos peritos. Sus declaraciones han contrastado por su larga duración con la concisión que tuvieron las de ayer y por la cantidad de personas que han acudido a la sala, llena hasta el último asiento. El juicio ha quedado visto para sentencia y
El primer testigo del juicio ha sido un perito que ha apoyado claramente la postura de Jazztel. A través de un informe, ha indicado que el problema generado por Telefónica sobre Jazztel en referencia a los retrasos en el acceso al bucle de abonado conocido como OBA- es que le impide generar ingresos, lo que provoca la disfunción de la compañía. Esta situación provoca, siempre según el perito, que Jazztel incumpla el plan de negocio, lo que genera una mala imagen entre los analistas y dificulta la búsqueda de financiación entre los accionistas.
El perito ha subrayado que Jazztel que reclama en ese juicio 337 millones de euros al grupo que preside César Alierta- ha perdido potenciales clientes que no ha podido captar al no disponer de los medios adecuados para ello y ha señalado que el plan estratégico de Jazztel era razonable.
Otro de los peritos, Luis Castejón, ha mantenido la tesis contraria. En su opinión, los plazos de acceso al bucle de abonado (OBA) de Telefónica son más exigentes que los de otros operadores de Europa. Además, añade que Jazztel, con su experiencia como operadora, es plenamente consciente de que con ese volumen de solicitudes iba a congestionar la capacidad de operaciones de Telefónica. Castejón ha concluido afirmando que no se ha visto mermada la capacidad competitiva de Jazztel por los retrasos de Telefónica.
El turno de conclusiones ha empezado con Jazztel. Los abogados de la empresa que preside Leopoldo Fernández Pujals el despacho Cremades & Calvo Sotelo- han destacado las contradicciones en las que a su juicio ha incurrido Telefónica durante el juicio y han incidido en que si a Telefónica no le interesa la OBA, que se marche a otro país. Jazztel también ha acusado a Telefónica de sabotear las solicitudes de servicio de todos sus competidores.
En sus conclusiones, los servicios jurídicos de Telefónica han asegurado que el plan de negocio de Jazztel ha fracasado y que tenía dos opciones: o reconocer el error y dar la cara frente a los accionistas y la CNMV o echar la culpa a otro. Además, asegura que la resoluciones de la CMT no son vinculantes para el juez.
El primer testigo del juicio ha sido un perito que ha apoyado claramente la postura de Jazztel. A través de un informe, ha indicado que el problema generado por Telefónica sobre Jazztel en referencia a los retrasos en el acceso al bucle de abonado conocido como OBA- es que le impide generar ingresos, lo que provoca la disfunción de la compañía. Esta situación provoca, siempre según el perito, que Jazztel incumpla el plan de negocio, lo que genera una mala imagen entre los analistas y dificulta la búsqueda de financiación entre los accionistas.
El perito ha subrayado que Jazztel que reclama en ese juicio 337 millones de euros al grupo que preside César Alierta- ha perdido potenciales clientes que no ha podido captar al no disponer de los medios adecuados para ello y ha señalado que el plan estratégico de Jazztel era razonable.
Otro de los peritos, Luis Castejón, ha mantenido la tesis contraria. En su opinión, los plazos de acceso al bucle de abonado (OBA) de Telefónica son más exigentes que los de otros operadores de Europa. Además, añade que Jazztel, con su experiencia como operadora, es plenamente consciente de que con ese volumen de solicitudes iba a congestionar la capacidad de operaciones de Telefónica. Castejón ha concluido afirmando que no se ha visto mermada la capacidad competitiva de Jazztel por los retrasos de Telefónica.
El turno de conclusiones ha empezado con Jazztel. Los abogados de la empresa que preside Leopoldo Fernández Pujals el despacho Cremades & Calvo Sotelo- han destacado las contradicciones en las que a su juicio ha incurrido Telefónica durante el juicio y han incidido en que si a Telefónica no le interesa la OBA, que se marche a otro país. Jazztel también ha acusado a Telefónica de sabotear las solicitudes de servicio de todos sus competidores.
En sus conclusiones, los servicios jurídicos de Telefónica han asegurado que el plan de negocio de Jazztel ha fracasado y que tenía dos opciones: o reconocer el error y dar la cara frente a los accionistas y la CNMV o echar la culpa a otro. Además, asegura que la resoluciones de la CMT no son vinculantes para el juez.