Ese problema no es nuevo. El dominio que Microsoft impuso a menudo, con tácticas que muchos calificarían como mínimo de discutibles y que fueron denunciadas por la OCU en 2011 en el mercado de PCs y portátiles hizo que fabricantes y OEMs no tuvieran demasiados argumentos para lanzarse a vender equipos con Linux preinstalado.
Tan solo algunos hicieron esfuerzos en este terreno, y solo de forma tímida. Dell fue la más comprometida con este tipo de iniciativas, y de forma intermitente ofreció algunos PCs de sobremesa y portátiles basados en Ubuntu, una distribución que desde su aparición en 2004 ha sido la elección clara para quienes quisieron apostar por equipos con Linux.
Lamentablemente, dichos apoyos han sido más anecdóticos que otra cosa. Hoy en día es complicado encontrar más de un par de equipos de fabricantes con la opción linuxera, aunque aparte de eso hay algunas opciones adicionales más de distribuidores españoles que dan alternativas en ese sentido.
Dell y HP, los únicos que se salvan de la quema
En nuestro país sólo hemos encontrado un equipo de uno de los grandes fabricantes con Linux preinstalado. Se trata del Dell XPS 13, un modelo perteneciente al llamado Proyecto Sputnik que Dell inauguró para ofrecer un equipo con Ubuntu orientado a desarrolladores.
En realidad el Dell XPS 13 es un modelo perfectamente apropiado para usuarios convencionales. Este Ultrabook con pantalla de 13 pulgadas y resolución 1080p se vende con Ubuntu 12.04 LTS por un precio de 1.329,79 euros, y los interesados podéis encontrar este equipo en la tienda online de Dell en nuestro país en este enlace.
Mucho nos tememos que ahí se acaban las ofertas de grandes fabricantes en nuestro país. Eso no impide que no haya alguna otra opción en países europeos, como es el caso del Reino Unido, donde HP comercializa un equipo de sobremesa con formato All-in-One, el HP Pavilion 20-b101, por tan solo 299 libras esterlinas.
La configuración del equipo es modesta de ahí su reducido precio pero aún así resulta una solución interesante y además tenemos la garantía de 2 años por parte de HP que desde luego dudamos que incluya algo parecido a un servicio de soporte dedicado para usuarios que quieran un equipo con Linux pero no tengan demasiada experiencia con el sistema. Tenéis más información sobre esta alternativa en la tienda online de HP en el Reino Unido.
Tiendas que ofrecen equipos con Ubuntu
Esos dos equipos de Dell y HP son los únicos ejemplos de los grandes fabricantes, pero ¿qué hay de empresas de menor tamaño? En nuestro país existen algunas tiendas o fabricantes que ofrecen la opción de comprar un equipo con Linux, y el mejor ejemplo de ello es Mountain.
Este fabricante y distribuidor español lleva años demostrando que es posible ofrecer soluciones de calidad y con precios muy competitivos en un mercado dominado tradicionalmente por los grandes, y entre sus ventajas está precisamente el hecho de que ofrecen la opción de preinstalar Ubuntu en todos sus equipos. Esa instalación tiene un coste adicional de 22 euros en esas compras, pero abre un buen abanico de posibilidades gracias a un buen catálogo de soluciones en PCs de sobremesa y portátiles.
También tenemos a nuestra disposición algunas iniciativas específicamente destinadas a este mercado como PCUbuntu, una tienda online de ordenadores con Ubuntu preinstalados por defecto y que empezó su andadura recientemente. La oferta es algo más reducida pero puede ser interesante para aquellos que quieran apostar por esta alternativa y apoyar así un proyecto valiente.
A medio camino están tiendas que no ofrecen Linux preinstalado, pero que sí ofrecen equipos sin sistema operativo para que nosotros podamos instalar el que más rabia nos dé. Ahtec permite dicha opción en sus equipos, y eso al menos nos evita el coste de una licencia de Windows que en realidad nunca vamos a usar si es que realmente nunca la vamos a usar.
Atención, sorpresa: instalar Linux no es complicado
Obviamente contar con equipos con Linux preinstalado es una opción cómoda para la mayoría de usuarios tradicionales de Windows que están interesados en una alternativa diferente, pero lo cierto es que hoy en día cualquier ordenador con Windows incluidos PCs y portátiles con Windows 8, que tienen mucha más miga es perfectamente capaz de funcionar con una distribución Linux.
Así que si queremos disfrutar de Linux en un ordenador que nos parece interesante pero que llega con Windows preinstalado no tendremos que rasgarnos las vestiduras. Instalar una distribución Linux es en la mayoría de los casos una tarea muy sencilla, y cualquier usuario incluso aquellos sin experiencia previa pueden sustituir el sistema Windows preinstalado por una distribución Linux si así lo desea.
De hecho, esos procesos de instalación permiten también en la mayoría de los casos acabar contando con un arranque dual. Linux se instalará, pero respetará (si así lo hemos establecido durante el proceso de instalación) la partición que contenía el sistema operativo Windows, y en cada arranque podremos elegir si nos interesa trabajar con uno u otro indistintamente.
Aquí entran en juego algunos factores importantes para muchos usuarios, como la ausencia de soporte para ese proceso, algo a lo que también nos arriesgamos con los equipos y tiendas de las que hemos hablado. Es cierto que puede que algunas configuraciones den pequeños conflictos con hardware que puede no estar perfectamente soportado en la distribución Linux elegida, pero las más populares Ubuntu, Debian, openSUSE, Fedora, Arch Linux, por citar algunos ejemplos suelen ser compatibles con prácticamente cualquier configuración hardware. Y si no lo son, afortunadamente los foros de usuarios funcionan realmente bien y suelen ayudarnos a resolver nuestros problemas y, de propina, aprender algo más sobre informática, algo a lo que cualquier aspirante a linuxero debe estar siempre dispuesto a hacer.
Windows 8 y UEFI Secure Boot como obstáculo
Cuando Microsoft presentó Windows 8, lo hizo con una característica llamada UEFI Secure Boot que aportaba mejoras en la seguridad de los equipos con el nuevo sistema operativo de Microsoft. Dicha tecnología hace uso de una clave cifrada que verifica la integridad del sistema operativo y previene que ciertos tipos de amenazas malware infecten nuestro dispositivo. Microsoft, y aquí está el quid de la cuestión, obliga a los OEMs y fabricantes a integrar esa opción para que esos equipos se vendan con Windows 8 preinstalado, algo que interesa muy mucho a dichos OEMs y fabricantes, que han integrado dicha opción en todos sus PCs y portátiles.
Sin embargo, Secure Boot tiene sus inconvenientes, y el mayor de ellos es evitar que se puedan instalar sistemas operativos alternativos como Linux a no ser que 1) el usuario desactive la característica Secure Boot o 2) la distribución Linux a instalar incluya soporte para Secure Boot.
Afortunadamente, más y más distribuciones Linux han desarrollado sistemas que soportan Secure Boot, y actualmente las distribuciones más populares se pueden instalar en máquinas con Windows 8 sin aparentes problemas. De hecho, The Linux Foundation, el principal organismo de apoyo al desarrollo del kernel Linux, ha publicado una solución universal que distribuciones Linux de todo tipo podían utilizar, y eso ha servido para atajar también el problema de forma más sencilla.
Así pues, la instalación de distribuciones Linux sigue siendo perfectamente posible incluso en equipos que se venden con Windows 8 (y Secure Boot) preinstalado, de modo que comprar un equipo de última generación que nos interese por prestaciones no impide que luego podamos utilizarlo con la distribución Linux que elijamos.
Conclusiones: el que la sigue, la consigue
Es cierto que la situación de Linux en PCs y portátiles no es la más deseable, pero aún así existen opciones para lograr hacerse con un equipo con Linux en el mercado. Lamentablemente la situación no es favorable para aquellos que quieran empezar con Linux y quieran disponer de un equipo con alguna distribución como Ubuntu preinstalada, pero esos primeros pasos no son tan complejos gracias al trabajo de esos desarrolladores que han facilitado tanto la instalación como la interacción inicial con esas distribuciones.
Para el resto de usuarios, aquellos que sí disponen de alguna experiencia en el mundo Linux, las opciones son más amplias, ya que si están interesados en un PC de sobremesa o portátil concreto, será posible instalar una distribución Linux sin problemas tanto si quieren respetar la partición Windows preinstalada como si prefieren aprovechar toda la capacidad del disco para Linux.
Será difícil que la situación cambie de forma significativa a corto o medio plazo si no lo ha hecho ya, pero la conclusión es clara: aunque comprar equipos con Linux preinstalado es complicado, siempre podremos instalar Linux por nuestra cuenta, y aprender unas cuantas cosas por el camino.