Sin embargo, Facebook anunciaba este mismo año que WhatsApp y Facebook compartirían datos de sus usuarios entre sí para, entre otras cosas, ofrecer una publicidad mejor segmentada en Facebook. Las autoridades estadounidenses fueron las primeras en criticar esta medida, a las que se sumaron las europeas y las españolas. Como consecuencia, la red social dio marcha atrás en Europa, aunque de forma temporal.
Para la Comisión, esto demuestra que Facebook les proporcionó una información errónea o "engañosa", tal cual explican hoy en un comunicado:
"En el pliego de cargos de hoy, la Comisión toma la postura preliminar de que, contrariamente a los comunicados y la respuesta de Facebook durante la revisión de la compra, la posibilidad técnica de enlazar automáticamente las cuentas de usuario de Facebook con las cuentas de usuario de WhatsApp ya existía en 2014. En este punto, la Comisión tiene sospechas de que Facebook, de forma intencional o negligente, envió información incorrecta o engañosa a la Comisión, incumpliendo las obligaciones bajo la regulación de la UE."
Como decíamos al principio, Facebook tiene hasta el 31 de enero para presentar alegaciones. En caso de que éstas no convenzan a la Comisión, la multa impuesta por los organismos europeos podría ascender hasta el 1% de la facturación de Facebook. Traduciendo a números, y teniendo en cuenta que Facebook declaró el año pasado unos ingresos de 17930 millones de dólares, estaríamos hablando de una multa de hasta 179,3 millones.
Más información | Comunicado de la Comisión Europea