BARCELONA. (Agencias.) - El presidente del
Comité de Representantes Permanentes de la Unión Europea (Coreper), el embajador de
Finlandia -que ostenta desde el jueves la presidencia de la UE- Antti Satuli, aseguró
ayer que todas las opciones están sobre la mesa, en relación con el fichaje
del comisario europeo Martin Bangemann por Telefónica cuando aún ocupa su puesto de
comisario europeo, incluida la posibilidad de denunciar al comisario ante el Tribunal de
Justicia de la UE. El embajador Satuli, que asume desde el jueves la presidencia del
Coreper, el órgano permanente que prepara las decisiones del Consejo de Ministros
comunitario, anunció que los Quince tomarán una decisión sobre el caso Bangemann la
semana que viene.
Satuli, confirmó que varios gobiernos comunitarios han hecho referencia al
artículo 213 del tratado, que prevé la posibilidad de llevar a un comisario ante la
justicia europea por incumplimiento de sus obligaciones.
El Tribunal de Luxemburgo podría decidir su cese inmediato por falta grave y privarle del
derecho a la pensión o a cualquier otro beneficio sustitutivo.
En cualquier caso, el hasta ahora comisario de Industria y Telecomunicaciones, Martin
Bangemann, no podrá asumir su nuevo cargo en Telefónica hasta que los gobiernos de la UE
nombren a su sustituto o decidan por unanimidad dejar su puesto vacante hasta la
constitución de la nueva Comisión Europea.
Ayer siguieron produciéndose críticas al polémico fichaje del comisario alemán. El
presidente del Parlamento Europeo y eurodiputado popular español, José María Gil
Robles, advirtió que la Eurocámara mirará con lupa a Telefónica. Gil
Robles insistió ayer en su crítica y calificó de indignante y desmoralizante
la actuación de Bangemann y dijo: No sé si (Telefónica) ha querido un golpe
mediático o realmente ha pensado que la influencia de este comisario iba a seguir
después. Desde luego, si ha pensado esto último, yo creo que el anuncio en este momento
ha eliminado cualquier posibilidad de influencia posterior, porque el señor Bangemann,
ante las instituciones europeas va a quedar como un apestado.
Críticas alemanas
Entre las críticas destaca la del Gobierno alemán, que considera que su compatriota ha
hecho un flaco servicio a su país. Bangemann causó un daño adicional
considerable a la imagen de la Comisión Europea e hizo un flaco servicio a Alemania,
aseguró el portavoz del Gobierno, Uwe-Karsten Heye, en declaraciones que publica hoy el
diario Bild.Asimismo, el ministro de Defensa de Alemania, Rudolph Scharping, y
líder del Partido Socialista Europeo, manifestó su indignación con la actitud de
Bangemann y consideró que el comisario -suspendido de funciones el jueves- debería
perder su pensión, en línea con la ley alemana, que prevé que los funcionarios que se
incorporan al sector privado pierdan su pensión estatal. Según algunos medios, Bangemann
cobraría más de 160 millones de pesetas al año en su nuevo empleo en Telefónica. Su
pensión europea sería de 7.400 euros (1,2 millones de pesetas) al mes.
Piqué considera que se ha cumplido la ley
El ministro de Industria y Energía y portavoz del Gobierno, Josep Piqué, declaró
ayer que cree que se ha cumplido la ley en la contratación por parte de
Telefónica del comisario europeo Martin Bangemann. Piqué aseguró, en la rueda de prensa
posterior al Consejo de Ministros, que el Gobierno no tiene opinión respecto
a la contratación de Bangemann como asesor de la presidencia y miembro del consejo de
administración de Telefónica. Como única valoración, el ministro portavoz aseguró que
al Gobierno le parece oportuno que se cumpla la ley y creo en que este caso se ha
cumplido.
Asimismo, desde Bruselas, donde asistió a una reunión con líderes socialistas europeos,
el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, dijo que le parece no sólo
inaceptable que un comisario en activo llegue a acuerdos con una sociedad privada
que tiene que ver con sus competencias, sino que es muy triste que una Comisión que
ha sido objeto de críticas y ha tenido que dimitir, que está en funciones, tenga como
colofón de sus trabajos un punto negro como el comportamiento de Martin Bangemann.