PP rechaza regular el uso del correo electr贸nico en las empresas
El Partido Popular rechaz贸 hoy una propuesta socialista para instar al Gobierno a que se regule el uso del correo electr贸nico en las empresas, al considerar que se debe esperar a que lo haga previamente la Comisi贸n Europea.
(EFECOM)
.- Durante el pleno de la C谩mara Alta, la senadora popular Mercedes Coloma explic贸 que es "m谩s prudente" esperar a que se regule en el 谩mbito europeo y que, mientras tanto, se opte por la elaboraci贸n de c贸digos de buenas pr谩cticas en los convenios colectivos.
Ya en agosto del 2001 la Uni贸n Europea inici贸 los tr谩mites, a trav茅s de consulta p煤blica, para elaborar una directiva que regule de forma arm贸nica el uso del correo electr贸nico en las empresas, seg煤n apunt贸 la senadora, quien asegur贸 que estar谩 aprobada en 2004 贸 2005.
"Es mejor esperar a que en Europa se estudie sosegadamente y en profundidad" este asunto, para luego aprobar alguna normativa "no vaya a ser que luego haya que dar marcha atr谩s", explic贸.
Sin embargo, el resto de los partidos pol铆ticos representados en el Senado apoyaron la iniciativa socialista de que se regule el uso del correo electr贸nico en las empresas, con el prop贸sito de fijar por un lado criterios sobre la validez jur铆dica de las comunicaciones entre empleados y, por otro, determinar los l铆mites al uso de este sistema por los trabajadores y a su control por parte de los empresarios.
Los representantes de los grupos de la oposici贸n apuntaron que no es necesario esperar a la Uni贸n Europea, porque el mercado laboral cada vez es m谩s dependiente de las nuevas tecnolog铆as y progresivamente se generan m谩s problemas y litigios judiciales al respecto.
En este sentido, el senador socialista Franciso Arnau explic贸 que la utilizaci贸n del correo electr贸nico puede ocasionar la colisi贸n del derecho a la intimidad de los trabajadores con otros derechos de los empresarios. En su opini贸n, ya existe abundante jurisprudencia que facilitar铆a la elaboraci贸n de una norma sobre su utilizaci贸n para incorporarla posteriormente al Estatuto de los Trabajadores.
Las sentencias dictadas por los tribunales son muy variopintas, ya que abordan desde el despido de trabajadores por utilizaci贸n indebida del correo electr贸nico, hasta el control indebido de los mensajes por parte del empresario, a帽adi贸 este parlamentario.
Una del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, a su juicio muy significativa, otorg贸 eficacia jur铆dica a la dimisi贸n de un trabajador, con contrato de alta direcci贸n, que fue emitida a trav茅s del correo electr贸nico. Arnau insisti贸 tambi茅n en que debe dotarse de las m谩ximas garant铆as de seguridad a la emisi贸n de correos electr贸nicos para evitar, por ejemplo, la suplantaci贸n de sus autores o su manipulaci贸n fraudulenta.
La iniciativa del PSOE instaba al Gobierno "a regular la dotaci贸n de validez y eficacia jur铆dicas a las comunicaciones entre empresarios y trabajadores y entre sus representantes realizadas mediante correo electr贸nico, determinando las condiciones necesarias a fin de garantizar la autor铆a y recepci贸n real de los mensajes".
En segundo t茅rmino, la moci贸n ped铆a al Ejecutivo que regulara "los l铆mites del control empresarial del correo electr贸nico de los trabajadores, cuando sea proporcionado por la empresa, garantizando los derechos a la intimidad personal y al secreto de las comunicaciones".
Ya en agosto del 2001 la Uni贸n Europea inici贸 los tr谩mites, a trav茅s de consulta p煤blica, para elaborar una directiva que regule de forma arm贸nica el uso del correo electr贸nico en las empresas, seg煤n apunt贸 la senadora, quien asegur贸 que estar谩 aprobada en 2004 贸 2005.
"Es mejor esperar a que en Europa se estudie sosegadamente y en profundidad" este asunto, para luego aprobar alguna normativa "no vaya a ser que luego haya que dar marcha atr谩s", explic贸.
Sin embargo, el resto de los partidos pol铆ticos representados en el Senado apoyaron la iniciativa socialista de que se regule el uso del correo electr贸nico en las empresas, con el prop贸sito de fijar por un lado criterios sobre la validez jur铆dica de las comunicaciones entre empleados y, por otro, determinar los l铆mites al uso de este sistema por los trabajadores y a su control por parte de los empresarios.
Los representantes de los grupos de la oposici贸n apuntaron que no es necesario esperar a la Uni贸n Europea, porque el mercado laboral cada vez es m谩s dependiente de las nuevas tecnolog铆as y progresivamente se generan m谩s problemas y litigios judiciales al respecto.
En este sentido, el senador socialista Franciso Arnau explic贸 que la utilizaci贸n del correo electr贸nico puede ocasionar la colisi贸n del derecho a la intimidad de los trabajadores con otros derechos de los empresarios. En su opini贸n, ya existe abundante jurisprudencia que facilitar铆a la elaboraci贸n de una norma sobre su utilizaci贸n para incorporarla posteriormente al Estatuto de los Trabajadores.
Las sentencias dictadas por los tribunales son muy variopintas, ya que abordan desde el despido de trabajadores por utilizaci贸n indebida del correo electr贸nico, hasta el control indebido de los mensajes por parte del empresario, a帽adi贸 este parlamentario.
Una del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, a su juicio muy significativa, otorg贸 eficacia jur铆dica a la dimisi贸n de un trabajador, con contrato de alta direcci贸n, que fue emitida a trav茅s del correo electr贸nico. Arnau insisti贸 tambi茅n en que debe dotarse de las m谩ximas garant铆as de seguridad a la emisi贸n de correos electr贸nicos para evitar, por ejemplo, la suplantaci贸n de sus autores o su manipulaci贸n fraudulenta.
La iniciativa del PSOE instaba al Gobierno "a regular la dotaci贸n de validez y eficacia jur铆dicas a las comunicaciones entre empresarios y trabajadores y entre sus representantes realizadas mediante correo electr贸nico, determinando las condiciones necesarias a fin de garantizar la autor铆a y recepci贸n real de los mensajes".
En segundo t茅rmino, la moci贸n ped铆a al Ejecutivo que regulara "los l铆mites del control empresarial del correo electr贸nico de los trabajadores, cuando sea proporcionado por la empresa, garantizando los derechos a la intimidad personal y al secreto de las comunicaciones".