Apple y Google se acusan mutuamente de usar sin permiso su tecnologÃa patentada de teléfonos móviles.
El caso bajo consideración comenzó en el 2010 cuando las fabricantes de teléfonos avanzados presentaron demandas una en contra de la otra por violación de patentes. Las compañÃas han presentado decenas de recursos parecidos alrededor del mundo para proteger su tecnologÃa. Apple, en particular, argumenta que los teléfonos Android fabricados para utilizar softwares de Google copian elementos de sus iPhones.
WASHINGTON, (Reuters/EP) - Apple y Motorola Mobility, una unidad de Google, se enfrentaron de nuevo este miércoles en una corte de Estados Unidos, en un proceso para determinar si un juez deberÃa reabrir o no una demanda en la que las compañÃas se acusan mutuamente de usar sin permiso su tecnologÃa patentada de teléfonos móviles.
El caso bajo consideración comenzó en el 2010 cuando las fabricantes de teléfonos avanzados presentaron demandas una en contra de la otra por violación de patentes. Las compañÃas han presentado decenas de recursos parecidos alrededor del mundo para proteger su tecnologÃa. Apple, en particular, argumenta que los teléfonos Android fabricados para utilizar softwares de Google copian elementos de sus iPhones.
En el caso revisado este miércoles, Apple acusa a Motorola Mobility, que desde entonces ha sido comprada por Google, de infringir cuatro patentes. Motorola, en tanto, acusó a Apple de infringir una patente esencial, necesaria para el funcionamiento de un teléfono móvil.
Los recursos fueron evaluados por una corte de distrito estadounidense de Illinois. El juez Richard Posner, que tomó el caso, lo desestimó en junio antes de enviarlo a juicio, bajo el argumento de que ninguna de las compañÃas tenÃa suficiente evidencia para probar su acusación.
Motorola Mobility presentó entonces una apelación para que el caso fuera reabierto. La corte de apelaciones del circuito federal podrÃa tardar dÃas o meses para emitir una decisión.
En la audiencia del miércoles, muchas de las preguntas del panel de tres jueces se centraron en si las compañÃas se habÃan esforzado lo suficiente para elaborar acuerdos que autoricen las patentes del otro, o si alguna de las partes podrÃa ser calificada como "reticente a pagar por licencias".
En el lenguaje legal, un "reticente a pagar por licencias" es una compañÃa que no negocia de manera seria un monto a desembolsar para hacer uso de una patente que está infringiendo. Esa firma podrÃa enfrentar una orden prohÃba la venta de productos que utilizan la tecnologÃa patentada.
La jueza Sharon Prost preguntó sobre la falta de disposición de Apple a pagar para utilizar la patente de Motorola Mobility.
El juez Joshua Rosenkranz, que defendÃa a Apple, argumentó que la fabricante del iPad no era "reticente a pagar licencias" sino que Motorola Mobility estaba pidiéndole que desembolsara 12 veces lo que habÃa estado cancelando previamente para hacer uso de la tecnologÃa.
Si el caso es reabierto en parte o totalmente, una o las compañÃas habilitadas pueden proceder a validar su demanda en una corte inferior, dependiendo del dictamen.
En las operaciones de la tarde en la Nueva York, las acciones de Apple descendÃan un 4,9 por ciento a 470,25 dólares tras una tibia respuesta al lanzamiento de su nuevo iPhone 5C, los tÃtulos de Google subÃan un 0,5 por ciento a 893,50 dólares.
El caso bajo consideración comenzó en el 2010 cuando las fabricantes de teléfonos avanzados presentaron demandas una en contra de la otra por violación de patentes. Las compañÃas han presentado decenas de recursos parecidos alrededor del mundo para proteger su tecnologÃa. Apple, en particular, argumenta que los teléfonos Android fabricados para utilizar softwares de Google copian elementos de sus iPhones.
En el caso revisado este miércoles, Apple acusa a Motorola Mobility, que desde entonces ha sido comprada por Google, de infringir cuatro patentes. Motorola, en tanto, acusó a Apple de infringir una patente esencial, necesaria para el funcionamiento de un teléfono móvil.
Los recursos fueron evaluados por una corte de distrito estadounidense de Illinois. El juez Richard Posner, que tomó el caso, lo desestimó en junio antes de enviarlo a juicio, bajo el argumento de que ninguna de las compañÃas tenÃa suficiente evidencia para probar su acusación.
Motorola Mobility presentó entonces una apelación para que el caso fuera reabierto. La corte de apelaciones del circuito federal podrÃa tardar dÃas o meses para emitir una decisión.
En la audiencia del miércoles, muchas de las preguntas del panel de tres jueces se centraron en si las compañÃas se habÃan esforzado lo suficiente para elaborar acuerdos que autoricen las patentes del otro, o si alguna de las partes podrÃa ser calificada como "reticente a pagar por licencias".
En el lenguaje legal, un "reticente a pagar por licencias" es una compañÃa que no negocia de manera seria un monto a desembolsar para hacer uso de una patente que está infringiendo. Esa firma podrÃa enfrentar una orden prohÃba la venta de productos que utilizan la tecnologÃa patentada.
La jueza Sharon Prost preguntó sobre la falta de disposición de Apple a pagar para utilizar la patente de Motorola Mobility.
El juez Joshua Rosenkranz, que defendÃa a Apple, argumentó que la fabricante del iPad no era "reticente a pagar licencias" sino que Motorola Mobility estaba pidiéndole que desembolsara 12 veces lo que habÃa estado cancelando previamente para hacer uso de la tecnologÃa.
Si el caso es reabierto en parte o totalmente, una o las compañÃas habilitadas pueden proceder a validar su demanda en una corte inferior, dependiendo del dictamen.
En las operaciones de la tarde en la Nueva York, las acciones de Apple descendÃan un 4,9 por ciento a 470,25 dólares tras una tibia respuesta al lanzamiento de su nuevo iPhone 5C, los tÃtulos de Google subÃan un 0,5 por ciento a 893,50 dólares.