Según su ponencia, considera generalizada la proliferación de lo que él ha venido a llamar Piratería doméstica y que el canon por copia privada impuesto, no es más que un parche a las limitaciones técnicas de la industria para evitar que se pirateen, indicando también que el derecho por copia privada ha de interpretarse por lo tanto de forma restrictiva. Nótese, que no otorga según el ponente derecho alguno a la copia. Por otro lado destacar, eso si, desde una impecable argumentación jurídica, la falta manifiesta de interés por proteger los intereses de los consumidores, optando en éste caso por la defensa de la industria para que, según su parecer, ésta a su vez responda por los autores.
Volviendo a su concepción originaria del canon, y estimando su aplicación como medida subsidiaria a la aplicación de aquellos discos no protegidos, llegó a estimar que los autores que protegieran sus discos con medidas anticopia, no deberían recibir importe alguno a cargo del canon por copia privada.
Desde putaSGAE queremos recoger ésta propuesta aunque creemos preciso matizar varios detalles, de hecho, muchos. Carece de sentido que se pretenda hacer una relectura restrictiva del canon por copia privada, dado que no se aplica el canon de forma restrictiva, sino todo lo contrario. Como respuesta mimética encontraremos por parte de la SGAE, que precisamente por esto no se aplica el canon de forma completa, es decir, nos cobran parte de lo que nos deberían (o querrían) cobrar. Por si alguien se le olvida, seguimos estando en un estado de derecho, no se nos puede criminalizar de antemano ni de forma generalizada. Todos copian música bueno, puede que en su entorno, aseguramos que no es así en el nuestro, el software libre (libre, no gratuito), aunque no lo quieran ver, existe. Se venden muchísimos discos más por supuesto, por citar un sólo dato, en este último verano, la venta de cámaras digitales se ha multiplicado por un 500%, imaginemos por un sólo momento la cantidad de Terabites en archivos fotográficos que tienen existir sólo con nuestras fotos, también puede que intencionadamente (o no) se haya olvidad por un momento los grandes consumidores de discos: las empresas y las ingentes cantidades de discos que se utilizan en el devenir diario. Aunque siempre es más sencillo echar mano de estudios sesgados e intencionados que buscan culpabilizar o responsabilizar a otros de fracasos e incompetencia propia.
La cruzada por el disco, emprendida por las entidades de gestión la creemos basada en una intencionada perversión del término apoyada en profundo desconocimiento por el legislador. Si la evolución natural del vinilo parece ser la cinta de audio y a su vez e CD-audio, intentan convencernos de que el siguiente paso está en el CD-data. Es posible grabar fonogramas, por supuesto, pero no por ello hemos de olvidar el CD-data es el soporte físico por excelencia de nuestra sociedad.
Realizando un símil con su antecesor natural, el papel, quizás podamos ver lo absurdo y escandaloso del Canon por copia privada. El papel, como soporte, es susceptible de ser utilizado para registrar elementos susceptibles de estar protegidos por derechos de autor, cualquiera puede coger un libro y fotocopiarlo, pero no por ello nadie tiene la brillante idea de gravar con un canon la producción papelera española.
Imaginemos por un sólo instante el asalto de la policía a Papelera Peninsular y la incautación de todo el papel existente en sus almacenes porque distribuyen Papel a las fotocopiadoras. Pues es el mismo caso ocurrido en CD world, en el que tras denominarlo como La mayor acción antipiratería de Europa pasó a ser el incidente más bochornoso de las fuerzas de seguridad en Europa. Y que esperamos sea oportunamente sancionado.
Reproducido de Plataforma AntiSgae
Volviendo a su concepción originaria del canon, y estimando su aplicación como medida subsidiaria a la aplicación de aquellos discos no protegidos, llegó a estimar que los autores que protegieran sus discos con medidas anticopia, no deberían recibir importe alguno a cargo del canon por copia privada.
Desde putaSGAE queremos recoger ésta propuesta aunque creemos preciso matizar varios detalles, de hecho, muchos. Carece de sentido que se pretenda hacer una relectura restrictiva del canon por copia privada, dado que no se aplica el canon de forma restrictiva, sino todo lo contrario. Como respuesta mimética encontraremos por parte de la SGAE, que precisamente por esto no se aplica el canon de forma completa, es decir, nos cobran parte de lo que nos deberían (o querrían) cobrar. Por si alguien se le olvida, seguimos estando en un estado de derecho, no se nos puede criminalizar de antemano ni de forma generalizada. Todos copian música bueno, puede que en su entorno, aseguramos que no es así en el nuestro, el software libre (libre, no gratuito), aunque no lo quieran ver, existe. Se venden muchísimos discos más por supuesto, por citar un sólo dato, en este último verano, la venta de cámaras digitales se ha multiplicado por un 500%, imaginemos por un sólo momento la cantidad de Terabites en archivos fotográficos que tienen existir sólo con nuestras fotos, también puede que intencionadamente (o no) se haya olvidad por un momento los grandes consumidores de discos: las empresas y las ingentes cantidades de discos que se utilizan en el devenir diario. Aunque siempre es más sencillo echar mano de estudios sesgados e intencionados que buscan culpabilizar o responsabilizar a otros de fracasos e incompetencia propia.
La cruzada por el disco, emprendida por las entidades de gestión la creemos basada en una intencionada perversión del término apoyada en profundo desconocimiento por el legislador. Si la evolución natural del vinilo parece ser la cinta de audio y a su vez e CD-audio, intentan convencernos de que el siguiente paso está en el CD-data. Es posible grabar fonogramas, por supuesto, pero no por ello hemos de olvidar el CD-data es el soporte físico por excelencia de nuestra sociedad.
Realizando un símil con su antecesor natural, el papel, quizás podamos ver lo absurdo y escandaloso del Canon por copia privada. El papel, como soporte, es susceptible de ser utilizado para registrar elementos susceptibles de estar protegidos por derechos de autor, cualquiera puede coger un libro y fotocopiarlo, pero no por ello nadie tiene la brillante idea de gravar con un canon la producción papelera española.
Imaginemos por un sólo instante el asalto de la policía a Papelera Peninsular y la incautación de todo el papel existente en sus almacenes porque distribuyen Papel a las fotocopiadoras. Pues es el mismo caso ocurrido en CD world, en el que tras denominarlo como La mayor acción antipiratería de Europa pasó a ser el incidente más bochornoso de las fuerzas de seguridad en Europa. Y que esperamos sea oportunamente sancionado.
Reproducido de Plataforma AntiSgae
