Europa Press.e..- La demanda presentada este martes en el tribunal federal de San Francisco (EE.UU.) recoge información confidencial de las comunicaciones internas de dicha fundación a través del programa de espionaje PRISM, sin ningún tipo de orden judicial por parte del gobierno estadounidense. La EFF ha demandado en nombre de Human Rights Watch, Greenpeace y el Consejo de Relaciones Americano-Islámicas.
"Cualquier autorización judicial, ejecutivo o ejecutiva del Programa de Seguimiento de Asociaciones o la adquisición y retención de la información y las comunicaciones de los demandantes, sus miembros y su personal es ilegal e inválida", ha asegurado el director legal de EFF Cindy Cohn en la demanda, según recoge Bloomberg.
El Gobierno de Obama, a través de su director de inteligencia nacional y acusado en la demanda, James Clapper, ha comentado que la adquisición de datos se obtiene de forma segura y legal y que es por el bien y la seguridad de todos, especialmente con la intención de evitar peligros como el terrorismo justificando que está permitido gracias a la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera.
No es la primera demanda que recibe el Gobierno de EE.UU en relación con el tema de la vigilancia y el acceso a información de dichas empresas. Hace menos de un mes, la Unión Americana de Libertades Civiles presentó otra queja por las informaciones filtradas por el extrabajador de la NSA Edward Snowden, que está sacudiendo y dejando contra las cuerdas al Gobierno de EE.UU.
Enlaces relacionados:
- Bloomberg
"Cualquier autorización judicial, ejecutivo o ejecutiva del Programa de Seguimiento de Asociaciones o la adquisición y retención de la información y las comunicaciones de los demandantes, sus miembros y su personal es ilegal e inválida", ha asegurado el director legal de EFF Cindy Cohn en la demanda, según recoge Bloomberg.
El Gobierno de Obama, a través de su director de inteligencia nacional y acusado en la demanda, James Clapper, ha comentado que la adquisición de datos se obtiene de forma segura y legal y que es por el bien y la seguridad de todos, especialmente con la intención de evitar peligros como el terrorismo justificando que está permitido gracias a la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera.
No es la primera demanda que recibe el Gobierno de EE.UU en relación con el tema de la vigilancia y el acceso a información de dichas empresas. Hace menos de un mes, la Unión Americana de Libertades Civiles presentó otra queja por las informaciones filtradas por el extrabajador de la NSA Edward Snowden, que está sacudiendo y dejando contra las cuerdas al Gobierno de EE.UU.
Enlaces relacionados:
- Bloomberg
