Asociación de Internautas

   Noticias - 07/Junio/00

Telefónica y otras operadoras acumulan una lista de 50.000 peticiones de ADSL

Antonio Ruiz del Árbol, Inés Abril. Madrid.

La tecnología ADSL se vendió como la solución al raquitismo del uso de Internet en España. Pero a siete meses de su lanzamiento, 50.000 clientes en lista de espera aguardan todavía entre dos y cuatro meses a que la tarifa plana e Internet a alta velocidad sean una realidad en su domicilio. Telefónica y el resto de los proveedores, acuciados por la demanda, se han puesto las pilas.

La falta de inversión de Telefónica en su red tradicional (en 1999 cayó un 20%) y la pereza de sus presuntos competidores para entrar en el segmento de telefonía fija local han convertido en obsoletas las infraestructuras de telecomunicaciones que llegan al domicilio del abonado. La principal víctima, aunque no la única, ha sido Internet, que en España mantiene cuotas de penetración pequeñas. Como panacea para esta situación, la Administración y los operadores han prometido, primero, una red de cable que no termina de llegar y, después, el ADSL (siglas de Asymmetric Digital Subscriber Line: línea digital asimétrica, que permite la transmisión simultánea de voz y datos sin que se interfieran).

El pasado mes de noviembre, obligada por el Ministerio de Fomento, Telefónica lanzó esta tecnología, que permite navegar por Internet a alta velocidad sobre las líneas de cobre tradicionales (ver recuadro) y tarifa plana. La respuesta de los internautas y de las pymes fue fulminante y llovieron las peticiones. Pero la operadora dominante no apostaba en ese momento por el ADSL. El resultado, tras siete meses, son sólo 10.000 conexiones operativas y una lista de espera de 50.000 peticiones, que se traduce en demoras entre dos y cuatro meses para instalar el servicio, según reconocen los suministradores e intalacores de los equipos.

La responsabilidad no sólo recae sobre Telefónica. El resto de los operadores, BT, Jazztel, Airtel..., han preferido que el operador dominante hiciera el rodaje del ADSL para comprobar su rentabilidad.

A pesar de la publicidad, Telefónica no ha facilitado el despliegue de ADSL y hasta hace semanas sólo había homologado los equipos de Alcatel. El colapso ha llegado hasta tal punto que Rogelio Turrado, del Defensor del Internauta (una asociación privada vinculada a la Asociación de Internautas), la define como "un desastre total, tanto en las demoras como en el funcionamiento".

A esta organización llega una media de entre cinco y diez reclamaciones diarias relacionadas con el ADSL y la mayoría de ellas se produce por los retrasos. Según los datos del Defensor del Internauta, la demora media en la instalación es de dos a tres meses. Telefónica, por su parte, asegura que ahora ya sólo se tarda un mes en hacer operativo el ADSL.

Los clientes también se quejan de que Telefónica instala con rapidez la primera parte del equipamiento de la casa (el filtro separador o splitter). En ese momento empieza ya a facturar, pero el servicio no es operativo hasta que se dota su domicilio con el módem de usuario.

Colapso

El colapso en esta tecnología ha producido la milagrosa resurrección de un sistema de transmisión veterano en Telefónica: RDSI. Esta red es ya de datos, pero se desarrolló antes de que existiera la conmutación de paquetes y, a pesar de su moderada velocidad de transmisión, es un bálsamo para los internautas que cuentan como único soporte con el hilo de cobre.

Telefónica reconoce las críticas, pero esgrime en su defensa que la tecnología es nueva, tanto para ellos como para los usuarios y su instalación es compleja. Además asegura que una parte de los retrasos se debe a que los clientes no tienen en sus casas los equipos adecuados para operar Internet de alta velocidad, muy especialmente los ordenadores.

La operadora homologa a Alcatel, Lucent y Ericsson

Desde el mes de abril las cosas han cambiado en el mundo del ADSL. Telefónica facilita ahora la conexión de sus competidoras en sus centrales de conmutación. Jazztel ya se ha estrenado en Madrid y Barcelona instalando unas 500 líneas en mayo, del mismo modo que Airtel y BT Telecomunicaciones, que ya cuentan con una significativa cartera de pedidos.

Además, Telefónica ha ampliado su catálogo de equipos para esta tecnología: en principio sólo tenía homologados los de Alcatel, esta semana ha dado su visto bueno a los de Lucent y Ericsson será el próximo.

Fuentes de Amper, la primera y hasta hace dos meses, única instaladora de ADSL, señalan que el ritmo de despliegue de equipos se ha multiplicado por dos. Antes de abril se conseguía un promedio de 1.700 instalaciones al mes; en mayo la cifra ha ascendido a 3.000 y este mes se pueden alcanzar los 5.000 equipos colocados. En todo caso, para que a final de año las listas de espera no sigan creciendo y se cumplan las expectativas de contar con 100.000 líneas adaptadas al Internet de alta velocidad, el ritmo de instalación de ADSL debe elevarse hasta 13.000 al mes. Además de Amper, otras tres empresas se han especializado en la instalación de esta tecnología: Sintel, Abengoa e Inaltel.

Otro síntoma alentador es que, según fuentes de la operadora, Telefónica de modo unilateral, estudia una rebaja muy sensible de la tarifa plana para Internet publicada por el Gobierno (6.500 pesetas más IVA), como vía para acelerar la implantación del servicio. Telefónica ha lanzado una promoción hasta el mes de agosto en la que ofrece instalación y alta gratis en el servicio de Internet de alta velocidad.

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