ISPs, Telefónica y
ADSL La irrupción de
Telefónica en la guerra del Internet gratuito en España (navegación y correo
electrónico, que no llamadas telefónicas, la principal reivindicación) ha abierto
numerosos frentes de batalla. Para empezar, una parte de los ISPs empezaron ayer a barajar
la idea de contratar un buffete de abogados que denunciara a Telefónica por abuso de
posición dominante, al regalar un producto que está cobrando
a los proveedores de acceso. En segundo lugar, la brecha entre la Telefónica Interactiva
de Juan Perea y Telefónica Data de Guillermo Fernández Vidal se ha agrandado un poco
más.
Mientras Data, la antigua TTD, llevaba a cabo un programa para fidelizar a los
ISP, a través de Carlos Mariñas, el consejero delegado de la compañía, Perea, que, al
parecer, aspira a suceder algún día a
Villalonga, soltaba la bomba del acceso gratuito, universal e indefinido, para quien se
conecte por TeleLine a Infovía Plus. Telefónica Data se veía obligada a recomponer su
política de acercamiento a los proveedores de acceso y se acogía a la única carta que
puede quedarle para seguir facturando a estas pequeñas empresas: la tecnología ADSL.
Ayer martes extendía a los ISPs una invitación a sendos seminarios en Madrid y
Barcelona, los días 22 y 24 de junio, respectivamente, para hablarles de las
grandes oportunidades del ADSL. ¿Volverán a caer en el nuevo señuelo de
Telefónica, después de que la operadora les haya engañado primero con Infovía,
después, con Infovía Plus y ahora con el acceso gratuito? La multinacional española de
las telecomunicaciones les ha prometido que les permitirá vender y facturar la
tecnología ADSL, después de integrarles amplia documentación y ensalzar su labor
formadora del público. (Porque son los ISP quienes han educado y atendido al público,
fomentando el uso de Internet).
¿BOICOT A PRODUCTOS DE TELEFÓNICA?
La invitación llegó en medio del fragor de la discusión. Uno de los proveedores
sugería que cada empresa aportara 100.000 pesetas y, una vez recaudados unos 20 millones
pesetas, procedentes de 200 compañías, se contratara un a despacho de abogados
norteamericano especializado.
Podríamos contratar a los mismos que han puesto una demanda contra las compañías
de cable americana por no realquilar sus líneas a los ISPs y otras productoras de
TV, sugería. La discusión, desarrollada a través de la lista de proveedores de
Rediris, iba precedida de títulos tan elocuentes como El principio del fin y
Coordinación de proveedores de Internet en España .
Entretanto, TeleLine empezaba a captar centenares de clientes, muchos de ellos internautas
normales, lectores de LaBrujula.Net, que aprovechaban la ocasión para registrarse
online y probar el servicio, con frecuencia sin otro interés que conocer el
funcionamiento del servicio y encontrar respuesta a la sospecha de si en adelante
Infovía Plus marcharía todavía más despacio. Los más
anti-Telefónica colgaban sus opiniones en foros como
es.charla.conexión.tarifa-plana y en Eldebate.net, señalando que
desconfiaban por sistema de las ofertas gratuitas de Telefónica.
Otra línea de discusión se refería a la publicidad engañosa que los medios de
comunicación estaban potenciando, al señalar que Internet es gratis. Algunos veían en
ello una nueva tomadura de pelo a la
reivindicación de la tarifa plana, que con esta cortina de humo volvía a desdibujarse en
el horizonte. Los colectivos internautas acogían con frialdad la noticia de TeleLine, y
algunos dirigentes avanzaban a
LaBrujula.Net que se está barajando la idea de promover un boicot general a Telefónica y
sus productos.
ADSL PARA SEPTIEMBRE
El sábado 19 la Asociación de Internautas (AI) celebra en Madrid su primera Asamblea
General, y de esta reunión puede salir una nueva estrategia de actuación. El panorama de
confusión (de poca utilidad,
la verdad, para el usuario de a pie y para el desarrollo de Internet en España) se
completaba ayer con una información conocida ayer por esta redacción, referida al ADSL.
Esta tecnología que ofrece acceso a
alta velocidad a una cuota mensual fija, y que se erige en la alternativa al cable, no
estaría disponible al público en julio ni en agosto, como afirmaba el secretario general
de comunicaciones.
Según fuentes solventes, en julio podría contratarse, pero hasta mediados de septiembre
no estaría verdaderamente en funcionamiento. Telefónica no tiene prisa por implantarla,
las operadoras competidoras presionan para que se retrase al máximo, la CMT sospecha que
podría dar lugar a situaciones monopolísticas y la presión social, protagonizada por
los colectivos, medios y grupos internautas, no existe, pues casi nadie parece confiar en
esta tecnología.
Si a esta confluencia de fuerzas, se añade la circunstancia de que en ningún país
europeo funciona y que incluso en Estados Unidos existen reservas sobre su eficacia, se
entiende mejor la situación. Aquí, de momento, la única realidad tangible es que
transcurre el tiempo y parecen perderse todas las oportunidades de haber hecho algo grande
o, al menos, novedoso.
REPRODUCIDO DE LA BRUJULA |