| Ciertamente y mirado bajo la perspectiva de
tiempo pasado, deberíamos ser conscientes de que jamás hemos visto a la Operadora, a la
"Magnífica", es decir, a Telefónica, tan apurada como en los días previos a
ese 3-S (día en el que se celebró la primera huelga de Internautas). Y es que no era
para menos. las iras de las masas es lo único que inquieta a esos grandes monopolios,
oligarquías o como se le quiera llamar, porque ciertamente, son las únicas que los
pueden desbancar. Así pues, - conocedores como son de los mecanismos de la mente
colectiva, fácilmente manipulable si se coge a tiempo -, se inventaron incluso una AUI
(Asociación de Usuarios de lnternet), que era la que debía representarnos en las
"negociaciones" con Telefónica. Curiosamente ha sido la única vez que el
monopolio ha querido nego- ciar. Pero en el momento que vimos a aquellos de traje
impecable y maletín en mano entrando a la sede de Telefónica, impecablemente
retransmitidos por las televisiones propiedad de¡ monopolio, dijimos, ¡no!, esos no
somos nosotros. Así que Pérez Subías (presidente de ese "engendro'), se quedó
compuesto y sin maletín, pero eso sí, afirmando alguna que otra incoherencia como que
lnternet no debía pagarse por pasos sino por bytes recibidos, ¡pues lo que nos faltaba!,
que tuviéramos que ver las web's sin imágenes, sin interactividad y hasta sin le- tras,
si se tercia, todo en pro de la incomunicación y de que la factura telefónica se vaya
engordando. En aquel momento, ni siquiera
Telefónica se dio cuenta de lo difícil que es una unificación de los "internautas.
Se habla de "colectivo internauta", 'internautas", 'dicen los internautas',
según los internautas.. como si ser internauta fuera algo especial (unas veces como
apestados y otras como superdotados, según se tercie), y es que incluso, este término
debería desaparecer, si lo que deseamos que Internet forme parte de las vidas de todos.
¿Acaso hablamos de telefoneros, faxistas o maquinodescríbirneros (en el caso de los más
arcaicos)?, Precisamente porque utilizar la Red, en esencia, es (o debería ser) algo tan
normal como entrar en una biblioteca para buscar un dato, es tan complicado que las
personas que la utilizan se unan en un colectivo para defender algo. Niños, abuelos,
industriales, futbolistas, "pijos", "hoderas", dependien- tes,
marineros, amas de casa, maestros, monjas, instituciones, asocia- ciones... y hasta el
Opus, están y utilizan lnternet, ¿Cómo hacer que todas estas personas encuentren un
punto en común para asociarse?, ¿Podría ser la consecución de la tarifa plana
quizás?, ¡podría ser!, pe- ro4 ¿sería esto suficiente para movilizar a un 'pico',
acostumbrado a una asignación de 200.000 pesetas al mes para sus 'gastillos*?, ¿O para
un empleado que se conecta desde la oficina y las facturas de teléfono las paga su jefe?.
¿Y esa troupe de funcionarios a los que en- tre todos les pagamos la conexión, se
movilizarían?. Difícil cuestión.
Casi paralelamente y como réplica al fraude de la AUI,
nació la Asociación de Internautas, en medio de otras con mucha menos credibilidad y
fines tan poco claros corno exceso de protagonismo, como fue la ya desaparecida UCY.
Evidentemente, ojalá hubieran surgido miles repre- sentando a cada colectivo real y cuyos
representantes se reunieran para sacar adelante objetivos comunes, en algo tan
transcendental y determinante para el desarrollo como son las telecomunicaciones,- sobre
las que el pueblo hemos perdido el control dejándolo en manos de quienes de la peor
manera van a utilizarlas -, (algo así como el parlamento europeo), pero esto, -
seguramente porque el fenómeno lnternet no ha cogido desprevenidos a todos y cada cual lo
ha asumido como puede -, no ha sido posible, Ahora Telefónica ya no teme a los
"inter- nautas" y los considera un colectivo incapaz de organizarse. Pero la
pasada semana, ocurrió algo importante y que como casi todo lo que es verdaderamente
importante, nos ha pasado desapercibido: un presidente de una operadora en competencia con
otra igualitaria como es Telefónica, recibió, invitó a comer y depadió de igual a
igual con Víctor Domingo, - presidente de la Asociación de lnternautas -, y otros
representantes de la misma.
En este detalle, que los mal intencionados pueden tildar de
"peloteo", .amiguismo" o 'partidismo", esta servidora, - que no
pretende más que los usuarios de una vez podamos tener voz y voto en un tema que nos
incumbe directamente, es decir, que podamos decidir sobre cómo enfocar nuestro futuro
dentro de la sociedad de la información y que no sean solo las operadoras las que hagan y
deshagan. según sus necesidades de mercado -, ha visto como una operadora ha legitimado a
una Asociación de Internautas que nos representa, para tratar de igual a igual con
operadoras y gobierno sobre el tema de las telecomunicaciones. Si este detalle no se
obvia, olvida o malversa, ni por parte de los usuarios ni por parte de la Asociación y
sobre todo, si este detalle es asumido por los medios de comunicación y se lo da la
importancia que tiene, que es mucha, los usuarios de la Red, a través de nuestros re-
presentantes legitimados, - la Asociación de lnternautas-, entraremos con pleno derecho
de voz y voto en este gran debate social, hasta ahora vetado al poder y las explotadoras
de la comunicación. Así pues, esta servidora desde ahora y desde esta página, tira el
guante a esa Asociación legitimada, esperando que se deje la piel por la sociedad. Si
Jazztel ha departido y legitimado a los representantes de los usuarios de las
telecomunicaciones, talante muy poco democrático demostrarían tanto Telefónica como el
gobierno si no lo hicieran.
Gema Castellano |
