España es el país en el que el colectivo del taxi y fundamentalmente los taxistas de Madrid y Barcelona han sido capaces de paralizar ya dos liberalizaciones del sector que es más absurdo que esté cerrado a la concesión administrativa. Como daños colaterales, cualquiera que innove en transporte y economía colaborativa, se puede ver en un serio aprieto.
España es el país en el que existe una basura de ley de emprendedores, que no sirve absolutamente para nada y que pasará a la historia como la ley más inútil para crear empresas y favorecer el empleo de todas las redactadas en todo el mundo.
España es el país en el que también le vamos a cobrar a los emprendedores por salir fuera del país si consiguen poner su idea en verdadero valor. Y somos tan chulos que les cobramos impuestos por lo que pudieran ganar a futuro, incluso antes de que dichos beneficios se materialicen.
Gracias Rajoy, ha sido increíble lo que has conseguido hacer con el sector emprendedor y tecnológico en tres años y pico de Gobierno.
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